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¿A quién no le gusta disfrutar de un exquisito café decorado con una excelente espuma de leche para luego subirlo a las redes sociales? Hay hábitos en nuestro día a día que generan un gran placer, y uno de ellos es disfrutar de un exquisito café con espuma. En el siguiente post te vamos a explicar unos métodos prácticos y sencillos para que puedas hacerte tú mismo en casa tu café ideal y con el que serás la envidia de todos tus seguidores de Instagram. ¡Muy atentos!

 

Hay que tener en cuenta que para conseguir la aplicación de espuma en el café precisaremos de una leche que sea espumosa y muy cremosa, algo que conseguiremos incorporándole aire, independientemente de si está fría o caliente. En las cafeteras profesionales esto es posible gracias a los vaporizadores que traen incorporados, pero en el ámbito doméstico también es posible.

 

La elección de la leche es algo fundamental. La espuma se obtiene más fácilmente con la leche entera, ya que su mayor cantidad de proteínas y grasas hacen que reacciona al calor y que al aplicarle vapor se vayan formando pequeñas burbujas de aire. Además te recomendamos que no calientes la leche demasiado, ya que si hierve o está mucho tiempo en el fuego podrían destruirse parte de las proteínas y por tanto no conseguiríamos el efecto deseado. No obstante, no habrá que confundir la espuma con la crema originada de determinados tipos de café cargados de determinados aceites que emulsionan durante la extracción.

 

¿Cómo se hace la espuma?

 

En casa tenemos muchos utensilios con los que podremos hacer espuma de leche para el café, así que te mostramos todas las opciones para que elijas tu favorita.

 

Realización manual

 

Se trata del procedimiento más sencillo, aunque a su vez, el que más esfuerzo físico requiere. Para lograr una deliciosa espuma necesitaremos un recipiente con tapa y la fuerza de nuestras manos. Tras verter la leche fría dentro del frasco y cerrarlo con tapa habrá que agitarlo durante un minuto, con la ayuda de una varilla, hasta conseguir la forma deseada.

 

Hay que tener en cuenta que cuanta más leche pongamos más difícil será que se genere espuma, por lo que se recomienda no emplear más de 100 ml de leche. Este procedimiento se puede seguir para crear la espuma de café, mezclando la misma cantidad de azúcar, agua y café soluble.

 

Con una batidora eléctrica

 

Este método nos ahorrará esfuerzo y nos permitirá hacer café con espuma en casa. Una vez tengamos la leche caliente (no más de 70ºC), habrá que verterla en un recipiente amplio y batirla hasta que cogiese volumen y espesor. En poco más de tres minutos, el aire se habrá juntado con la leche y se generará la espuma deseada. Con este método ganaremos precisión y comodidad.

 

Se recomienda, para evitar ensuciar toda la cocina con salpicaduras de leche, cubrir el recipiente en el que vayamos a realizar la espuma con papel film, dejando simplemente el hueco para el brazo de la batidora eléctrica.

 

En el microondas

 

Se trata de un método muy similar al anterior en el que se podrá disfrutar de la espuma calentita. Para ello se podrá emplear una mayor cantidad de leche, ya que la que no consiga espumar servirá para mezclar con el café y conseguir un capuchino o un café con leche. Lo ideal será no llenar más de la mitad de la capacidad del tarro.

 

Es importante seguir el procedimiento de forma rigurosa, de tal modo que una vez que hayamos agitado la leche con nuestras propias manos en el recipiente cerrado durante un minuto o minuto y medio, le quitaremos la tapa al frasco y lo calentaremos durante un minuto a máxima potencia. El resultado será una leche caliente con espuma por encima. ¡Un método práctico y delicioso!

 

Con espumador o jarra espumadora

 

Es una herramienta muy práctica y pensada expresamente para calentar y espumar la leche. Lo ideal será usar no más de 150 ml. La cafetera de prensa francesa sirve tanto para preparar un café intenso y sabroso como para conseguir una espuma de leche perfecta.

 

El procedimiento es bien sencillo, pues habrá que añadir leche fría o caliente en la cafetera y subir y bajar el émbolo hasta conseguir la deseada espuma. La espuma resultante será firme, duradera y muy cremosa.

 

Estos son solo algunos de los métodos existentes para crear una exquisita y decorativa espuma de café, lo que lo hace más suave, delicioso y divertido. Y es que cualquier persona en casa puede utilizar las herramientas que tenemos a mano, empleando diferentes métodos, para sopesar cuál es el que más nos interesa y disfrutar así de un rico café espumoso al nivel de nuestra cafetería preferida.